Material Complementario Clase 1

Comité Asesor de Bioética muestra sus frutos a un año de su creación

Santiago, 28 de junio de 2006. En consideración al creciente desarrollo de la investigación científica con seres vivos y con el fin de reforzar los aspectos bioéticos concernientes a las actividades científicas patrocinadas por Conicyt, especialmente a través de su Programa Fondecyt, el año 2005 se creó un Comité Asesor de Ética y Bioética.

Entre las principales funciones de este Comité se cuentan la revisión de proyectos del área de las Ciencias Biológicas, Médicas y otras afines, en ejecución o concursando. Esta supervisión se orienta a que los proyectos cumplan con las regulaciones de Ética y Bioética pertinentes, y poder evaluar las certificaciones que avalan la realización de los proyectos.

El Comité también informa a los Consejos Superiores de Fondecyt con los resultados de este estudio y los asesora en los casos en que se requiera la opinión de expertos en el tema o en la resolución de controversias que pudieran surgir entre el Investigador Responsable y Fondecyt. El grupo integrante del Comité está facultado para efectuar todo cometido que los Consejos Superiores le encomienden respecto al cumplimiento de los criterios establecidos por Fondecyt con respecto a las normas nacionales e internacionales de Ética y Bioética.
El Comité está conformado por Miguel Kottow, Doctor en Medicina y miembro de la Red BIOLAC-UNESCO; Patricio Michaud, Médico-cirujano y miembro del Comité de Ética del Servicio Salud Metropolitano Sur Oriente y Manuel Santos, Doctor en Ciencias y miembro del Comité de Bioética de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Una de las tareas iniciales de esta organización fue abrir el diálogo entre representantes de todos los sectores que participan en investigaciones con seres vivos. Para ello, en Noviembre de 2005, se organizó el taller "Bioética e Investigación Científica en seres Humanos y Animales”, cuyo objetivo fue avanzar en el estudio y en las recomendaciones en torno al compromiso bioético que el trabajo de los científicos del país debe adoptar.

Entre los temas abordados en el Taller estaban las consideraciones bioéticas y los proyectos de investigación Fondecyt, la visión de la autoridad sanitaria y los comités ministeriales de bioética en la investigación y aspectos generales sobre ética de la investigación científica en seres humanos y animales. Asimismo, en este encuentro se realizaron mesas redondas sobre aspectos fundamentales de la formación bioética de profesionales e investigadores en ciencias biomédicas y sociales, los requisitos de funcionamiento de comités institucionales de bioética y políticas generales de Conicyt relacionadas con estas materias.
El producto del Taller fue más de una docena de ponencias presentadas por miembros de diversas instituciones relacionadas con la investigación. Dichas presentaciones no tuvieron la intención de presentar posturas definitivas sino iniciar una interlocución que, convocando a la reflexión, asegurara el nivel técnico y ético de las investigaciones. El objetivo de estas acciones es poder dar mayor protección a “probandos” (sujetos en los que se experimenta) y a poblaciones huésped, todo enmarcado en la cautela del bien público.
El miércoles 21 de junio CONICYT lanzó el libro “Bioética e Investigación Científica en Seres Humanos y Animales”, primera publicación del Comité, a partir de las ponencias presentadas en el Taller. En el evento -que se realizó en la Cineteca del Centro Cultural Palacio la Moneda- el sacerdote Antonio Mifsud, Doctor en Teología y profesor de la Universidad Alberto Hurtado y Mireya Bravo, Directora del Magíster en Bioética de la Universidad de Chile, se refirieron a las diversas implicancias de esta compilación.

En el tiempo de funcionamiento que lleva el Comité Asesor también ha analizado algunos proyectos de investigación Fondecyt en curso o en concurso, que involucran investigación biomédica con seres humanos. El análisis de estos proyectos reveló deficiencias en sus aspectos bioéticos, aún cuando las iniciativas fueron debidamente aprobadas por comités de ética de prestigiosas instituciones. Las deficiencias más significativas detectadas estaban relacionadas con el Consentimiento Informado, y en particular con la deficiente información entregada a los pacientes. Por esto, el Comité Asesor entregó también un documento con Sugerencias para Escribir un Consentimiento Informado.
Asimismo, el Comité ha optado por circunscribir su acción en los siguientes ámbitos:

•Identificación y localización de los beneficios.
•Sustentabilidad y riesgos de la investigación.
•Aspectos metodológicos de la investigación (niños v/s adultos).
•Aspectos relacionados con el Consentimiento Informado.
•Evaluación ética institucional de los proyectos de investigación (acreditación).
•Aspectos bioéticos en el uso de animales de experimentación.



Fuente
http://www.fondecyt.cl/noticias/2006/comite_bioetica_logros.html



Reflexión y aplicación al Rol de Enfermería:

En el mundo actual en el que las investigaciones científicas están cada día más avanzadas, se hace cada vez más necesario la autorregulación de cada una de estas agrupaciones investigativas, respetando los principios morales que rigen a la humanidad, y que por ende fomentan el respeto hacia la condición de “persona”.
Es tarea principalmente de los profesionales de Enfermería y desde ahora ya como futuros profesionales, velar por las personas que se encuentran bajo nuestro cuidado, encontrando el bien y el equilibrio para cada uno de nuestros pacientes que se encuentran en situación de enfermedad. Sin duda alguna muchas veces nos encontraremos ante decisiones muy difíciles de tomar y de nuestra correcta opción dependerá el futuro y quizás hasta la vida de quienes necesitan de nuestra ayuda y por ello se hace muy relevante el conocer y respetar la historia de vida de cada uno de nuestros pacientes, así como también actuar conforme a las virtudes cardinales y quizás en algún caso también bajo las virtudes teologales, con la finalidad de poder otorgar nuestra opinión ante el resto del equipo de salud de manera fundada y coherente, de tal forma de resolver el dilema favoreciendo en todo momento la dignidad e independencia de la persona y respetando en todo momento los principios bioéticos que deben dirigir cada una de nuestras intervenciones.

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